¿Sabes? Me he dado cuenta de que el tiempo realmente nos cambia, las situaciones, las verdades o las mentiras; simplemente la vida misma nos hace cambiar...y para bien o para mal, es así como somos ahora, es así como nos percibimos y nos sentimos. Vivimos entre cambios constantes y no se nos permite mirar atrás. A veces simplemente creemos que nos hemos rendido, que no somos los mismos de antes y que, por mas que lo intentemos, nunca llegaremos a ser esa persona que tanto nos gustaba. Pensamos de pronto que nos hemos perdido en el camino; que no merecemos lo mismo, que hemos hecho daño, que hemos cometido errores, que hemos perdido fuerza y coraje...creemos que todo aquello que teníamos en nuestras manos, desaparecerá. Pero sabes, me he puesto a pensar...y quizá no hayamos cambiando para mal; quizá simplemente estemos descansando de la vida, de cada caminata recorrida, de cada lagrima y cada caída. De cada sueño roto y cada desdén. Quizá simplemente nos estemos haciendo fuertes.
Quizá, tú aquí y yo allá; cada uno esté recogiendo cada parte de su corazón, cada parte de su esencia y sus memorias, para entonces regresar. Ya no de la misma forma, ya no igual de vivos. Quizá ya no igual de valientes; pero igual de indestructibles...
GiiniiZz!!!***
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