Nos encontramos, nos amamos, nos disipamos. Así como antes, así como siempre...
Porque siempre existe entre nosotros la distancia, aún cuando estamos tan cerca.
Porque siempre aparecen nuestras dudas, nuestros miedos y nuestra incertidumbre...
Porque siempre que nos tocamos...se nos acelera el corazón. Porque siempre que me miras a los ojos, los míos rehuyen tu mirada. Porque cada vez que aparecen las palabras, nuestros impulsos nos atacan.
Porque cada señal es un sentimiento, cada lágrima una confidencia y cada abrazo una aflicción.
Porque tu conoces esas cosas de mí que nadie sabe, porque yo he visto esa parte de ti que no se ve.
Porque somos todo y somos nada. Somos aquellos amantes silenciosos que desaparecen, fugitivos que se ocultan tras un beso. Prófugos confundidos de un amor que no se entiende, atrapados en una historia infinita de llanto y sonrisas. Llenos de dolor transparente y heridas profundas. Porque tus manos me hieren, tus brazos me desarman y tu simple presencia me transforma. Porque es esa maldita distancia la que nos mantiene tan unidos, tan confundidos...
Porque yo te quiero, te quiero tanto que quema hasta las entrañas. Te extraño tanto que mi llanto te reclama. Te recuerdo tanto que, por un momento vuelvo a sentirte como antes, aquí conmigo. Entregándote a mí, solo a mí. Mirándome a los ojos, tocándome el alma. Besando mi vida y tomando todo de mí. Entonces te escucho, te siento, te encuentro, te beso; tan fuerte, tan lento...y entonces vuelvo a ti, vuelves a mí. Vuelve a nosotros ese sentimiento de nostalgia, pones tu mano sobre mi mejilla, mis lágrimas comienzan a caer. Eres tú, solo tú y siempre tú. Así como yo quiero, así como yo sueño, así; perfecto, como solo tú puedes llegar a ser...así, como solo tú has podido adentrarte en mis pupilas, así, como solo tú llegas a mi corazón. sueltas mi rostro y me dices que te vas. Mis lagrimas no cesan, no me dejes otra vez, no te vayas de mi lado, quédate, por siempre, solo un poco...siempre aquí. Sueltas mi mano, el tiempo se para y te detengo. Te pido solo un beso y un te quiero...Me das una promesa, me miras a los ojos y me entregas tu ternura, me devuelves eso que una vez logramos tener, me recuerdas esos días soleados tan radiantes, esas risas tan perfectas y esos sueños tan lejanos...me recuerdas esas cosas que tanto nos dijimos, esas noches que entre las estrellas bailamos y esos besos que entre los silencios nos rompieron. Me recuerdas que me amaste y que te amé...que esas cosas fueron nuestras; tan ciertas y divinas, tan sublimes y soberbias, y siempre lo serán. Entonces me das calma y consuelo, las heridas de mi alma se vuelven imperceptibles y sé que volveremos a encontrarnos y tal vez nos amemos, de nuevo, como antes...y entonces nos disipemos...como nunca, como siempre.
GiiniiZz!!!***
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